¿Jiménez, Giménez o Ximénez?

Graciano Jiménez Moreno 

En algunas ocasiones nos encontramos con el hecho de que diversos miembros de una misma familia escriben alguno de sus apellidos de manera distinta. Estas diferencias  pueden venir derivadas de la forma en que se escribieron en su día en las propias actas de los interesados en el Registro Civil. A veces, incluso, puede comprobarse que un apellido de una determinada persona aparece escrito de manera distinta en los registros de nacimiento, de matrimonio o de defunción.

Uno de los apellidos que pueden encontrase con formas diferentes es Jiménez, que puede aparecer también como Giménez o Ximénez. En este artículo hablaremos sobre la grafía de este apellido, que se da con cierta frecuencia en Munera. Para ello nos apoyaremos en el árbol genealógico de quien esto escribe, lo que puede ayudar, además, a que algunos lectores, parientes más o menos lejanos del autor, descubran nuevos datos sobre sus antepasados.

Antes de continuar es preciso recordar algunas de las consideraciones que la Real Academia Española (RAE) y la Asociación de Academias de la Lengua Española nos ofrecen sobre la ortografía de los apellidos. Así, en la obra Ortografía de la lengua española (Edición en línea. 2010) se dice:

Al igual que sucede con los nombres de pila, los apellidos españoles tienen fijada una forma canónica que no puede ser modificada a voluntad por los hablantes […]. Lo dicho no significa que, a lo largo de su evolución, estas voces no hayan experimentado vacilaciones, fonéticas o gráficas, que han podido derivar de la presencia, en la actualidad, de variantes con grafías peculiares o anticuadas: Cepeda y Zepeda, Ibarra e Ybarra, Mejía y Mexía, Miura y Mihura […].

En el árbol genealógico de muchos munereños es probable que, aunque ya no figure en los parientes más cercanos, aparezca el apellido Jiménez en alguno de sus antepasados. En mi caso particular este es mi primer apellido, el segundo es Moreno, pero mis ancestros se apellidaron también Cano, Ramírez, Peinado, Atencia, Calvo, Bódalo, Morcillo, Calleja, Serna, Blázquez, Arenas, de Lamo, Muñoz, Víllora, Palacios, Castillo, Rosillo, Caballero, Sánchez, Ramos, Fernández, Parreño, Flores, Ochoa, Bustos, Varea, Torres, Arjona, Martínez, Rosillo, Rodríguez, Moraga, Plaza, Cerro, Escudero, Alfaro, Romero, Carrizo, Molina, Canales, Roldán, Reales, Saiz, Ortega, Puche, Córdoba, Losa, Alarcón, Gabaldón, Motos, Mateo...

Inicialmente el apellido Jiménez se escribió con x. En la Edad Media la grafía x representaba un sonido muy parecido al que se emite cuando quiere imponerse silencio, similar a la pronunciación de la sh inglesa. A partir del siglo XVI este sonido medieval evolucionó al sonido que en la escritura moderna se representa con las letras j o g (ante e, i). No obstante, la antigua grafía con x aún se conserva en ocasiones en este apellido, así como en algunas variantes de nombres propios de persona y en algunos topónimos americanos. Puede ser interesante recordar aquí que nombres como México o Texas deben pronunciarse con j aun cuando se escriban con x.

Aunque el apellido Jiménez ya figura escrito con x en los primeros libros parroquiales de la iglesia de San Sebastián de Munera, a finales del siglo XVI, la rama a la que yo pertenezco procede de la cercana localidad de Minaya. Hasta donde he podido encontrar, mis ancestros minayeros ya vivían en esa localidad a principios del siglo XVII y fue uno de ellos, León Ximénez, nacido en 1778 en Minaya, quien contrajo matrimonio con una munereña en 1802 y fijo su residencia en Munera, donde ya nacieron sus descendientes.

A lo largo de varias generaciones el apellido Jiménez aparece en las actas de bautismo o nacimiento, en las de matrimonio y en las de defunción con las grafías x, j o g, indistintamente, tanto en los libros parroquiales como en los del Registro Civil. Es preciso recordar que el actual Registro Civil se creó en España en 1870 y comenzó sus anotaciones el 1 de enero del año siguiente. Por consiguiente, quienes deseen investigar sobre sus antepasados con anterioridad a esa fecha tendrán que recurrir a los libros en los que la iglesia registraba los bautismos, los matrimonios y los entierros.

Para conocer más detalles sobre la representación escrita del apellido Jiménez vamos a fijarnos en el árbol genealógico del autor, del que se indica a continuación la parte correspondiente a esta rama. El listado comienza en Cristóbal Jiménez, tatarabuelo del tatarabuelo de mi padre, y continúa la línea de transmisión del apellido hasta mi persona.


1. Cristóbal Jiménez.  Nacimiento: 10/11/1625 Minaya (Albacete). Matrimonio: Ana Calleja, 05/06/1645 Minaya (Albacete). Defunción: 26/10/1695 Minaya (Albacete).

2. Francisco Jiménez. Nacimiento: 30/05/1660 Minaya (Albacete). Matrimonio: María de Moya Alarcón, 22/06/1693 Minaya (Albacete). Defunción: 21/12/1720 Minaya (Albacete).

3. Alfonso Jiménez. Nacimiento: 11/03/1702 Minaya (Albacete). Matrimonio: Gerónima Martínez, 31/12/1724 Minaya (Albacete). Defunción: 22/11/1774 Minaya (Albacete).

4. Cristóbal Jiménez Martínez. Nacimiento: 05/06/1736 Minaya (Albacete). Matrimonio: Francisca Ochoa, 12/08/1759 Minaya (Albacete). Defunción: 01/08/1785 Minaya (Albacete).

5. León Jiménez Ochoa. Nacimiento: 11/04/1778 Minaya (Albacete). Matrimonio: Francisca Muñoz, 06/12/1802 Munera. Defunción: 30/11/1857 Munera.

6. Juan Antonio Jiménez Muñoz. Nacimiento: 12/02/1811 Munera. Matrimonio: Telma Leocadia Bódalo Víllora, 09/04/1834 Munera. Defunción: 24/07/1883 Munera.

7. Pedro Antonio Jiménez Bódalo. Nacimiento: 27/01/1849 Munera. Matrimonio: María de los Ángeles Cano Morcillo, 02/03/1874 Munera. Defunción: 04/09/1895 Munera.

8. Manuel Jiménez Cano. Nacimiento: 09/04/1884 Pozo Amargo. Matrimonio: Nieves Cano Peinado, 16/11/1908 Munera. Defunción: 24/10/1960 Munera.

9. Manuel Jiménez Cano. Nacimiento: 04/01/1918 Munera. Matrimonio: Julia Moreno Ramírez, 20/09/1945 Munera. Defunción: 31/10/1998 Albacete.

10. Graciano Jiménez Moreno.


Registro parroquial del bautismo de Cristóbal Jiménez, celebrado el 25 de noviembre de 1625 en Minaya.

En el primer registro de nacimiento, del año 1625, el apellido figura escrito con la letra x, de igual manera que aparece en el margen del asiento de 1645 (en el propio texto del registro figura con j) y en las actas o partidas de los años 1693, 1724, 1736, 1857, 1849, 1874 (partida parroquial del matrimonio). El apellido está escrito con j en los asientos correspondientes a los años 1645 (con la salvedad antes indicada), 1695, 1759, 1802, 1811, 1834, 1960, 1918, 1945 y 1998. Finalmente, el apellido consta con la letra g en las partidas de los años 1778, 1883 (tanto en el registro civil como en el parroquial), 1874 (registro civil), 1895 (registros civil y parroquial), y en los correspondientes asientos de carácter civil de los años 1884, 1908, 1918 (solo en el margen del acta) y 1952. He de aclarar que algunos datos del árbol no se han extraído de las correspondientes actas, sino de listados realizados con posterioridad a los hechos, y que por lo tanto no menciono su grafía original.


Registro parroquial del matrimonio de Cristóbal Jiménez, celebrado el 5 de junio de 1645 en Minaya.

Registro parroquial del bautismo de León Jiménez, celebrado el 15 de abril de 1778 en Minaya.

 A la vista de lo anterior resulta difícil, al menos para quien escribe estas líneas, sugerir la grafía más adecuada para las personas que pertenezcan a esta rama Jiménez. En mi caso, debo indicar que siempre escribí mi apellido con j, es decir, Jiménez y así aparece en el DNI. La principal razón de ello es que así lo hacía mi padre, con la misma grafía con la que figura en sus actas o partidas de nacimiento, matrimonio y defunción. Entiendo que puede considerarse como un accidente en el momento de la inscripción el hecho de que yo conste como Giménez en mi partida de nacimiento. Además, si en algún momento yo hubiese tenido que optar por una u otra grafía hubiera elegido sin duda la j, letra que sustituyó a la arcaica grafía con x, como he podido comprobar tantas veces en documentos antiguos relacionados con Munera. Debo resaltar nuevamente que, en mi árbol genealógico, el primer registro parroquial que he encontrado con la grafía j data del año 1645, muy anterior al que utiliza la letra g, que corresponde al año 1778.

 Para terminar, creo conveniente recordar que la RAE nos indica que «no es lícito que una misma persona utilice indistinta e indiscriminadamente cualquiera de las formas admitidas para su apellido: quien pertenezca a una familia de apellido Vásquez usará esta forma en su denominación, y no Vázquez, por más que se trate de variantes del mismo apellido». La duda surge cuando dos personas pertenecientes a la misma rama o familia concreta están registrados con dos variantes o grafías diferentes del apellido. ¿Qué se puede hacer entonces? Por su interés, merece la pena comentar el caso de una joven española que consiguió, no sin esfuerzo, cambiar la j de su Jiménez «oficial» por la g de Giménez.

El caso de esta joven consistía en que el apellido que figuraba en la partida de nacimiento del padre era Jiménez, contrariamente a lo que ocurría con el resto de la familia. Esta misma grafía, con j, se mantuvo lógicamente cuando se inscribió el nacimiento de la joven. La vía legal que aconsejaron a la interesada fue corregir el apellido del padre en la correspondiente partida de nacimiento. De esta forma, al ser oficialmente hija de Giménez, se simplificaba el procedimiento para la modificación de su propio apellido.

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