Toreros de Munera (III). Los años 60 (primera parte)

Graciano Jiménez Moreno

            El novillero munereño Francisco Hernández Peinado, que omitía el apellido paterno en los carteles y era conocido por sus paisanos como el Abisinio, vistió su primer traje de luces el 26 de abril de 1959 en Cieza (Murcia). Antes de presentarse en la plaza de Munera también había hecho el paseíllo en San Clemente (Cuenca) el 25 de julio de ese año.

Paquito Peinado en la plaza de Cieza el 26 de abril de 1959, tarde en la que vistió por primera vez el traje de luces.

            Tras la exitosa presentación de Paquito Peinado ante sus paisanos en la novillada sin picadores del 23 de septiembre de 1959, el joven diestro munereño volvería a la plaza de Munera en tres ocasiones más, todas ellas el año siguiente, en las que alcanzó resonantes triunfos. El primero de estos festejos se celebró el 26 de mayo de 1960, siendo su compañero de cartel Cipriano López el Espontáneo, y cortando un total de cuatro orejas y un rabo. Esto escribió el corresponsal de La Voz de Albacete sobre la actuación del diestro aquella tarde:

    Paquito Peinado, del que esta afición espera mucho, dio una vez más la nota de valor que le caracteriza, toreando muy valiente y de cerca y haciendo sus dos faenas completamente variadas al son de la música, matando a sus dos enemigos de una sola estocada cada uno, por lo que la presidencia le concedió las dos orejas de su primero y las dos y rabo de su segundo, saliendo a hombros.

Cartel del festejo del 26 de mayo de 1960 en Munera, festividad de la Ascensión

            En la feria del mismo año, el 23 de septiembre, Paquito Peinado volvió a vestirse de luces en Munera. En esta ocasión junto a Juan Correas Amador Gitanillo de Albacete y a la rejoneadora Gina María. Así reflejó el periódico de la capital albaceteña el triunfo del torero local:

    Paco Peinado alcanzó un resonante triunfo, pues como premio a sus dos brillantes faenas recibió las dos orejas, el rabo y una pata de su primero, y las dos orejas de su segundo, con vuelta al ruedo y apoteosis final.

Cartel de la feria taurina de Munera del año 1960 en la que intervino Paquito Peinado.

            Paquito Peinado hizo el paseíllo por última vez en el coso de su pueblo el 16 de octubre de 1960. Ese día se celebró un festival taurino con el propósito de recaudar fondos para la realización de unas obras en la iglesia parroquial de Munera.

Paquito Peinado participó en el festival del 16 de octubre de 1960 (Abelardo Vergara sustituyó al anunciado Cabañero). 

            El cartel que preparó Pedro Fornés para el festejo estaba compuesto inicialmente por los matadores de toros Juan Montero, José Gómez Cabañero y Emilio Redondo, y por los novilleros Baltasar Martínez Mancheguito y Paquito Peinado, triunfador de la última feria. Finalmente el también matador de toros Abelardo Vergara sustituyó al anunciado Cabañero. En la crónica que publicó La Voz de Albacete, firmada por el corresponsal Enrique García, se pudo leer:

    Paquito Peinado escucha ovación al torear de capa. La faena de muleta es valentísima y torera. Da naturales, de pecho, giraldillas y se adorna valientemente. Mata breve de una entera y descabello. (Ovación, dos orejas, rabo y vuelta, saludando desde los medios).

Los participantes en el festival del 16 de octubre de 1960 con el empresario pedro Fornés. A la derecha, Paquito Peinado.

            Paquito Peinado se presentó con picadores en la plaza de San Sebastián de los Reyes (Madrid) el 20 de mayo de 1962, lidiándose esa tarde reses de Alicio Cobaleda. No estuvo el debutante afortunado pues el primer astado de su lote volvió a los corrales después de escucharse los tres avisos, mientras que su labor en el segundo fue silenciada. Con este novillero inició el munerense Antonio Atencia su actividad como mozo de espadas. Recordaba Antonio, más conocido como Marcial, que juntos habían marchado a Madrid unas semanas antes de la actuación en San Sebastián de los Reyes para que el torero pudiera entrenarse en el ambiente taurino de la Casa de Campo madrileña. Paco Peinado fue un torero valiente que no pudo alcanzar mayores logros en la difícil carrera taurina.

            En la feria de Munera de 1961 se vistió de luces por primera vez un joven munereño: Isidro Ruiz Moreno, que se anunció ese día como Rondeño. Lo hizo como sobresaliente en una novillada sin picadores que se celebró el 22 de septiembre, con un mano a mano en el cartel entre Antonio González Antoñés y Enrique García. Tras esa tarde, la única que actuó en su localidad natal, Isidro vivió una larga carrera taurina, primero como novillero, llegando a actuar con picadores, y posteriormente como banderillero.

El munereño Isidro Ruiz actuó como sobresaliente en el festejo de feria del día 22.

            Isidro Ruiz Moreno nació el 28 de agosto de 1942. Su debut como espada tuvo lugar el 4 de mayo de 1967 en Utiel (Valencia). Llegó a torear bastantes festejos sin caballos en plazas levantinas y catalanas, algunas veces en la parte seria de espectáculos cómico-taurinos, utilizando en ocasiones el sobrenombre de Morenito de Alba. El 31 de julio de 1977 tomó parte en una novillada de noveles celebrada en Lloret de Mar (Gerona) en la que se disputaba el Trofeo de las Federaciones de Entidades Taurinas de Cataluña. El torero de Munera realizó una excelente faena al novillo que le correspondió que fue premiada con dos vueltas al ruedo, aunque no pudo conseguir el galardón. Los días 9 y 10 de junio de 1979 toreó las dos únicas novilladas con picadores de su dilatada etapa de novillero; fue en las plazas gerundenses de San Feliu de Guíxols y Figueras, alternando en ambas ocasiones con el portugués Víctor Mendes. Tras participar el 28 de agosto de 1980 en una novillada sin caballos en Fuenteguinaldo (Salamanca) decidió pasarse al escalafón de los banderilleros, compaginando desde entonces esta actividad con otras labores profesionales hasta su retirada a la edad de 57 años. En 1972 fijó su residencia en Barcelona.

El torero munerense Isidro Ruiz Moreno.

            En la feria de Munera de 1964, el 23 de septiembre, se presentó ante sus paisanos en una novillada sin caballos otro torero local, Antonio Moreno. Ese día la plaza presentó un lleno imponente como consecuencia de la actuación del munereño. Aunque el ganado resultó difícil Antonio Moreno recibió una oreja y aplausos en el primero y aplausos en el último de la tarde. El novillero munerense Antonio Morcillo Moreno figuraba sin su primer apellido en el cartel de la que fue su única actuación en Munera; anteriormente se había apodado también como el Sultán y el Espontáneo.

Cartel de la feria taurina del año 1964 con el munereño Antonio Moreno anunciado en la novillada del día 23.

            Tras su aprendizaje en capeas, Antonio vistió su primer traje de luces en La Solana (Ciudad Real). Aunque en el cartel de Munera se hace referencia a un triunfo anterior en la plaza de Vista Alegre (Madrid), no fue en esa plaza donde hizo el paseíllo, sino en la también madrileña de San Sebastián de los Reyes. Esto sucedió en una novillada de noveles que tuvo lugar el 21 de julio de 1963 en la que se anunció como Antonio Morcillo el Sultán. Otras actuaciones de este torero munereño tuvieron lugar en plazas como Torrelaguna (Madrid) y San Clemente (Cuenca). después de torear en su localidad natal Antonio decidió dejar la profesión taurina y desde hace bastantes años reside en Madrid.

Antonio Morcillo Moreno antes del comienzo de un festejo con su hermano Juan.

            Es obligado mencionar también a Luis Víllora Ortiz, hermano del ya citado Luciano, que también llegó a hacer sus pintos en el toreo. Ya abandonadas sus aspiraciones taurinas, Luis quiso aprovechar la ocasión que le brindó Pedro Fornés para torear en la plaza de su pueblo. Fue el 24 de septiembre de 1979 en una novillada sin caballos en la que, junto a los toreros de luces, Luis hizo el paseíllo vestido de corto para despachar en calidad de aficionado, como así se había anunciado en los carteles, el primer ejemplar de la tarde.

Luis Víllora tras su actuación en la plaza de Munera el 24 de septiembre de 1979.


El día 24 de septiembre de 1979 el munereño Luis Víllora actuó en calidad de aficionado para matar un novillo en la plaza de su pueblo.


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